Bienvenidos al Partido en el Estadio Aurinegro: Atletico Mitre vs. Gimnasia M.
¡Eh, amigues del fútbol! Hoy les traigo un manjar futbolístico directo desde Santiago del Estero, donde se dice que la pasión por el balón es casi tan grande como la devoción por Raly Barrionuevo o Charly García cuando tocan sus notas más épicas. Pero bueno, vamos a lo nuestro: Atletico Mitre y Gimnasia M., dos equipos que parecen estar rezando a San Expedito para encontrar el camino de la victoria cada jornada.
El Primer Tiempo – Un Golpe de Suerte
El partido arrancó animado con los muchachos de Mitre poniendo todas las pilas—parece que alguien prometió empanadas si ganaban—y lograron sacar ventaja gracias a L. Rios en el minuto 33 (un golazo muy normal pero necesario). Antes de eso, vimos una tarjeta amarilla para M. Kabalin al minuto 16; parece que quería llevarse un recuerdo del partido.
Con ese gol, nos fuimos al entretiempo pensando “bueno… ¿será este otro domingo aburrido?” porque hasta ahí no había mucho picante ni Iron Maiden tocando en vivo —todo bastante tranqui.
Y llega el Segundo Tiempo
Gimnasia dijo “acá estamos nosotros también” apenas comenzado el segundo tiempo con J. Puch igualando las cosas en el minuto 51. Saben qué dicen sobre ser paciente: incluso Ricardo Montaner te diría “la gloria está esperándote”. Buen intento para dar vuelta todo como una milanesa bien hecha.
Después siguieron los momentos tipo telenovela argentina con tanto cambio y drama subiendo tonos después del empate; sustituciones aquí y allá (porque aparentemente nadie estaba contento con quién estaba jugando), y unas cuantas tarjetas más solo para agregar sabor como si fuera ají molido en tu guiso preferido.
No podemos olvidarnos del clásico momento argentino cerca del final cuando M. Sanchez decide hacer algo extremadamente dramático ¡y le muestran roja directamente! Como decirle a tu vieja que votaste diferente…
En fin chiques, terminamos 1-1 entre estos dos titanes —dicho esto sin ninguna ironía claro— cada uno llevándose su merecido punto después de pelearlo como gato panza arriba durante esos tumultuosos 96 minutos cargados emocionalmente aunque técnicamente medio flojones.
¿Qué aprendemos hoy? Que en Argentina hasta un empate puede sentirse como haber ido a ver Soda Stereo pero solo escuchar covers toda la noche – no está mal eh… pero faltaba Gustavo diciendo “De música ligera”.
Nos vemos pronto para más aventuras futboleras llenas de sarcasmo y amor por nuestros pies bicicleteros favoritos.