¡Qué tal, che! Vamos a desmenuzar el partidazo en Mendoza como si fuera un recital de Charly García: con sorpresas y emociones hasta el final.
Ayer nos juntamos para la onceava fecha de nuestra querida Liga Profesional Argentina del 2025. El Estadio Juan Bautista Gargantini se vistió de gala (y no precisamente porque Calamaro decidiera hacer su comeback ahí) para recibir al partido entre Independiente Rivadavia y Racing Club.
El primer tiempo fue más dramático que novela de las nueve. Para los que llegaron tarde porque “el colectivo estaba lleno”, les cuento: arrancó todo color esperanza -como diría Diego Torres- para Racing con un gol bien piola de J. Nardoni asistido por L. Vietto al minuto 25, dejando a los locales masticando bronca e impotencia.
Pero amigos, esto es fútbol argentino: donde todo puede cambiar tan rápido como una promesa electoral. Y sí que cambió… aunque primero tuvimos nuestro festival amarillo – Tarjeta tras tarjeta, era casi como el reparto principal en una serie sobre abogados.
Ahora bien, entrado el segundo tiempo y luego del té (porque sin mate ni asado hay que aclimatarse), Independiente Rivadavia salió con todo desde el vestuario — parece que alguien les recordó lo sagrado qué es jugar en casa o capaz simplemente pusieron algo clásico tipo Rodrigo Bueno para motivarse.
Al sonar del minuto 69′, J. Barbieri encontró red después de combinar con S.Villa (ese pibe está en todas). Empate cantado muchachos y la hinchada reviviendo cual Fénix.
Para seguir con la analogía musical argenta, cuando parecía que íbamos hacia un triste empate… apareció otra vez Barbieri al minuto 79′ clavando otro grito sagrado para ponerse en ventaja –doblándolo mejor que Luca Prodan inmortalizando esos hits!
Desde entonces fue toda una agonía defensiva local; nene sálvese quien pueda mientras Racíng empujaba pero ya era tarde…
Ya terminó la música pues Independiente Rivadavia cerraba cortina ganando 2-1 contra Racing Club mostrándonos ese espíritu rockanrolero teniendo menos incluso estuvieron unos minutos pintados rojo directa gracias a A.Berti haciendo más temprana ducha él solo mano a mano vs Sprayette seguro te ofrece volver pero no hay vuelta atrás papá… ya está jugado…
Y nada gente así vivimos este espectacular duelo mendocino ¿Quién dijo basta? Por ahora seguimos celebrando esta victoria estilo Serú Girán—concierto completo , todos satifechos..Che eso es todo vayan bajandose lentito aún tenemos fútbol argentino pa rato.
¡Hasta la próxima jornada!