¡Hola, queridos fanáticos del fútbol! Hoy les voy a contar con un tono bien tanguero y algo de picardía rockera sobre el partido que se llevó entre Tristan Suarez y Deportivo Maipu en la siempre emocionante Primera Nacional. Un partidito más ajustado que pantalón de Charly García en los ’80.
Arrancamos sin árbitro destacado (sí, como un recital sin micrófono), pero eso no frenó las acciones. El balón empezó a rodar en el Estadio 20 de Octubre —un lugar que parece más una fecha patria que un campo de juego— allá por Ezeiza, Provincia de Buenos Aires.
Apenas si nos estábamos acomodando cuando D. Ramirez, ese mago malabarista al estilo Flaco Spinetta con la pelota, metió un gol para Deportivo Maipu ayudado por M. Viguet apenas al minuto 12. ¡Y ahí nomás arrancaron cantando ventaja!
Los amonestados no tardaron mucho en pintarse el pelo amarillo (sin ofender a Palito Ortega). I. Pietrobono recibió tarjeta amarilla porque sí o porque no; lo cierto es que fue al minuto 29 casi como quien pide permiso para ir al baño durante misa.
Al rato llegó A. Sosa por parte del Tristan Suarez e igualó las cosas antes del entretiempo – ¡esos goles son tan esperados como agua en Domingo Ramos! ¿El asistente? T.Perez, claro desde luego entregándole una pelota redondita casi bondiola cocinada perfectamente.
Parece ser que después del descanso los jugadores salieron con ganas de bailar cuarteto porque hubieron cambios aquí y allá: Silva entraba mientras otro salía… todos giraban más rápido que molinete trucho.
Luego ya encaminándonos hacia finalizar este encuentro palpitante donde cada equipo colgaba sus guantes cual Fito Paez su piano después conciertazo… Pero así terminábamos caballeros: Uno – uno como enfrentamiento Alfonsín vs Menem televisado pero sin tanto drama político.
La cosa quedó empatada amigos míos; ni vencedores ni vencidos sino todo lo contrario ¿no? Buenísima oportunidad pa’ ver algunas promesas echadas futbolísticamente hablando aunque hayan tenido menos precisión qué yo intentando pegarle arco iris ¡Je!
Así cerramos esta revisión distendida llena rimas baratas dignas Sabina borracho karaoke nocturno ¿y saben qué? Como dijo alguna vez Mostaza Merlo “partido es partido”, cualquier domingo tiene su tarde pasiones desatadas cancha través once contra once corriendo detrás sueños inflables.
Nos leemos la próxima muchachada hasta entonces sigan disfrutandonde nuestra hermosa locura llamada fútbol argentino!